Encontrar equilibro en tu vida mientras viajas y trabajas
|

Encontrar equilibro en tu vida mientras viajas y trabajas

Encontrar equilibro en tu vida mientras viajas y trabajas no es una tarea sencilla. Esta semana, por ejemplo, he estado pensando mucho en Traviajar y en cómo me gustaría compartir contigo esta experiencia.

He evaluado lo que quiero y cómo quiero expresarlo y la verdad no es una tarea sencilla mezclada con todo lo demás, así que iré poco a poco y sin prisa buscando algo de equilibrio, uno que necesito y del que quiero hablarte en este post.

[piopialo vcboxed=”1″]Cuando viajas y trabajas en tus propios proyectos, buscas siempre la manera de tener un equilibrio[/piopialo]

Encontrar equilibro en tu vida mientras viajas y trabajas

Tener tiempo para hacer turismo, para compartir con gente nueva, amigos o familia que viva en el lugar que visitas; para trabajar; estudiar y ayudar a las personas que visitan tu blog; atender clientes; alimentarte bien; hacer ejercicio y fuera de eso descansar; leer un libro o salir con tu pareja para disfrutar el uno del otro. Esto cuando viajas en pareja, cuando estás solo, tal vez esta salida la harás con “la persona del momento”.

El tema es que el tiempo es lo que más necesitamos para encontrar ese equilibrio del que te hablo. El tiempo bien administrado es lo que hace que podamos enfocarnos, sacar adelante proyectos y seguir con nuestra vida “normal” donde sea que estemos.

No es sencillo, no te voy a decir mentiras, no es fácil llegar a un nuevo lugar, organizarte y de una empezar a tener la rutina que siempre has tenido.

No sé cómo será para los otros nómadas digitales, pero a mí la adaptación me cuesta al menos una semana. Por eso cuando voy a un nuevo sitio me encanta estar siquiera un mes, porque sé que si es menos tiempo vamos a tener que correr y poco voy a disfrutar realmente lo que me gustaría del nuevo lugar.

Cuando estuvimos en Asia, en el 2014, en casi todos los lugares estuvimos más de 20 días precisamente por esta razón.

Descubrimos desde el primer momento que estar poco tiempo no se adaptaba a nuestras necesidades de equilibrio entre viajar y trabajar y puede que por eso hayamos llegado de Asia sin visitar tantos y tan bellos lugares, pero nos queda la satisfacción de que realmente vivimos el sitio y lo disfrutamos al tope según nuestra propia dinámica.

Eso es lo que te invito a que hagas, a que crees tu propia dinámica de viaje.

Viajar hoy en día no consiste en hacer la mochila e irte de un lugar a otro como una veleta, menos aún si vas con tu trabajo al hombro.

Necesitas un plan, no un itinerario rígido, pero sí unos hábitos que te ayuden a enfrentar el nuevo cambio de sitio y sobre todo disfrutarlo sin sentirte culpable por no tener todo el tiempo del mundo para gozarlo.

Consejos para encontrar equilibro en tu vida mientras viajas y trabajas

Aprende a identificar cuánto tiempo necesitas para adaptarte a un nuevo lugar

Evalúalo con viajes cortos que hagas con tu familia. Cómo es cuando estás en el nuevo sitio y cómo cuando llegas nuevamente a casa. Lo que debes revisar es cuánto tiempo te toma volver a tomar la rutina. Por ejemplo:

Si haces ejercicio todos los días, ¿lo sigues haciendo cuando viajas y cuando llegas a casa como si no hubieses tenido un cambio?

Si eres vegetariano o llevas una dieta especial por algún motivo, cuando viajas la sigues o te “das tus caprichos” porque estás viajando. ¿Cuánto tiempo te toma retomar tu sana alimentación?

Si estudias mientras viajas, sigues la rutina de dicho estudio o dejas todo adelantado mientras viajas o atrasado para cuando regresas.

Si trabajas mientras viajas, ¿Cuánto tiempo te toma retomar tu rutina de trabajar X horas al día sin intervenir con tu ocio y tu vida social?

Así con otras áreas de tu vida. La idea es que identifiques cuánto tiempo te demoras en llevar una vida normal y productiva cuando haces y regresas de un viaje.

Sé honesto, nadie te está evaluando salvo tu mismo ¿Así que para qué te dices mentiras?

No hagas planes de viajes “maratón”

Si has identificado que eres súper productivo viajando y trabajando, seguro los viajes maratón no serán un problema para ti, pero si ya sabes que eres de los que necesita uno o cinco días para aclimatarte y poder ser productivo y rendir en tus actividades cotidianas, lo mejor es no planear viajes maratón porque esto solamente te frustrará y hará que no disfrutes realmente de los lugares que conozcas.

¿Qué es un viaje maratón? Es un viaje estilo: “18 días para 4 países y 10 ciudades” donde no pasas ni dos días en un mismo hotel. No has terminado de llegar cuando ya estás saliendo para otro lado.

De esos 18 días pasas 5 en aviones o buses y solamente 13 “disfrutando”.

Son viajes a toda leche, como dicen. Con un corre-corre impresionante que te dejan enfermo cuando los terminas y sí, con fotos súper chulas pero a un gran costo.

No digo que este tipo de viaje sea malo.

Yo he hecho varios así y los he disfrutado, pero si me pones a elegir, definitivamente es mejor esos 18 días de vacaciones dedicarlos a un sólo sitio y sacarle todo el partido, que “intentar” ver 4 países y 10 ciudades de las cuales no te quedará sino ampollas en los pies.

Sin embargo, no todos somos iguales y por ello es importante que identifiques si Traviajar es lo tuyo, porque si lo es, descubrirás tu mismo que este tipo de viajes no son para ti.

Evita la frustración

Cuando ya sabes cómo eres, cuánto tiempo te demoras en adaptarte y que los viajes maratón no son para ti. No te dejes convencer de hacer un viaje “rápido” con la promesa de que ya le tienes “el tiro” a esto de viajar y trabajar al tiempo.

Si no quieres vivir con frustración lo mejor es que te lo tomes con calma.

Si es necesario parar más tiempo del que realmente te gustaría y estar estable una temporada para reorganizarte, hacer mejores planes, hazlo. No te encamines a viajes y viajes solamente porque puedes hacerlo gracias a la libertad que viajar y trabajar de da.

Lo mejor es planificar bien lo que deseas hacer y el cómo quieres hacerlo para evitar frustraciones por no lograr hacer tu trabajo como quieres, porque los proyectos se te están saliendo de las manos o porque no pasas más tiempo con la familia o haciendo lo que realmente te llena.

Tener la libertad de vivir la vida a tu manera te da también la responsabilidad de hacer de esto algo agradable para ti. Algo que sea realmente mágico y lleno de buenos momentos.

La libertad tiene su costo y si quieres disfrutarla lo mejor es que aprendas a ser responsable con ella.

¿Cómo lo hago yo?

Como te digo, a mí me cuesta una semana, tal vez un poco par de días menos, adaptarme a un nuevo lugar. Y no por el tema del jet lag, la comida o el barrio, sino por el tema del trabajo.

He identificado que cuando recién llego a un sitio me gusta sentirlo. Identificar cuándo es el mejor momento allí para hacer lo que me gusta: escribir.

Necesito tiempo para identificar cuándo estoy más inspirada. No en todos los sitios es en la mañana, ni en todos es en la noche. Soy mujer, soy cíclica y no siempre estoy del mismo ánimo.

Por eso me gusta escucharme y ver qué necesito y darle a mi cuerpo y a mi espíritu lo que pide. Cuando llego a un nuevo lugar necesito descansar. Dormir bien, adaptarme a la nueva cama, al nuevo ambiente y por ello necesito tiempo.

Tiempo que luego debo invertir en organizar nuevamente mi rutina y volver a ser productiva.

Como te digo, no en todos los lugares funciona igual, no siempre es lo mismo. Buscar mi espacio y mi tiempo para hacer lo que quiero requiere más que abrir el computador y empezar. Yo no funciono así, al menos no siempre.

Por ello es que es genial ayudarte con técnicas como la meditación, la cual te ayuda a centrarte, relajarte y focalizar tu energía. A mi me viene genial para encontrar equilibrio en mi vida mientras viajo y trabajo.

Cada persona es un mundo y no todos nos comportamos de la misma manera, por eso es tan importante aprender a conocerte, escucharte y sobre todo hacer caso a lo que tu cuerpo y tu mente te dicen.

Deja de comportarte como un robot, de hacer lo que los otros hacen porque lo hacen. Busca tus propias respuestas y anda tu camino según tus reglas. Descubrirás que la vida es mucho más satisfactoria de esta manera.

¿Cómo haces tú para volver a equilibrar tu vida mientras viajas y trabajas?

Publicaciones Similares

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Por favor lee esto antes de enviar tu comentario. Los datos de carácter personal que me proporciones rellenando este formulario, serán tratados por Diana Garcés como responsable de Traviajar. La finalidad es gestionar los comentarios del blog. Legitimación: tu consentimiento.
Destinatarios:los datos que me facilitas estarán ubicados en los servidores de KnownHost LLC (proveedor de hosting de Diana Garcés) Con domicilio en Delaware, Estados Unidos. Más información en: https://www.knownhost.com/.
Derechos podrás ejercer tus derechos para rectificar, limitación y suprimir los datos escribiéndome a [email protected]. Puedes consultar la Política de Privacidad para mayor información.

40 comentarios

  1. ¡Hola Diana! Muy certero este post, sobre todo para aquellos que comienzan con esto de ser nómadas digitales, ya que la pasión por viajar puede desvirtuarnos un poco de lo que es emprender este nuevo estilo de vida y confundirnos, porque una cosa es hacer turismo y otra es vivir viajando, así que organizarse es el paso principal, tal como lo muestras en tu experiencia, es preferible determinar la cantidad de días que se pasarán en una ciudad antes de abandonarla y empacar y desempacar en otra, es todo un proceso que finalmente puede agotarnos emocionalmente, porque la persona que viaja es aquella que permite detenerse y saborear cada lugar con pausa, porque en definitiva la prisa no nos da la oportunidad de disfrutar ni de comprender esta nueva forma de vivir viajando, y aunque creamos que la vida no nos va alcanzar para recorrer el mundo entero, lo poco que conozcamos será suficiente para vivirla plenamente y saber que trabajar mientras se viaja es haber escogido las ciudades idóneas que nos otorgarán la perfecta inspiración que necesita nuestro proceso creativo. ¡Un abrazo!

    1. Eliana yo no podría haberlo dicho mejor. Muchas gracias por este maravilloso comentario. Me quedo con: “la persona que viaja es aquella que permite detenerse y saborear cada lugar con pausa”

      Un abrazo,

  2. Hola,
    Un post interesante, la verdad es que para mi viajar siempre es salir de la rutina y dejarlo todo abandonado por eso solo lo hago en periodos vacacionales. Al leer esta entrada me he dado cuenta de que el problema esta en la poca organización y en los viajes maratón. Tal vez tengo que replantearme algunas cosas.
    Un saludo!

    1. Guadalupe pues creo que he cumplido con mi trabajo si te he hecho replantearte algo. Sigue disfrutando de tus viajes y busca la manera de hacerlo mucho más productivos y divertidos según tus propias necesidades. Un abrazo guapa 🙂

  3. Por eso es que a mi no me gusta viajar a las carreras, todo con calma es mejor, quedarse varios días donde sea que se vaya, disfrutar de a poquitos, aunque también depende de la compañía en que se esté y del motivo del viaje, todo tiene su razón.

  4. Hola Diana, tu post es muy interesante y completo y desde luego, práctico. Yo soy sedentaria, quizás demasiado, entonces cuando leo estas maravillas que tú haces de viajar de un lugar a otro y permanecer en cada sitio el tiempo necesario, aclimatándote a ese lugar, encontrando tu espacio, viendo cuanto tiempo necesitas para recuperar tu equilibrio y tu rutina, pues, ¡chapó! Hay que tener mucha constancia y mucha fuerza para ello. La meditación te ayudará, no te digo que no, porque además, me gusta la meditación, pero además, como tu bien dices, (y me ha encantado esa parte) somos “mujeres” y somos “cíclicas”. No todos los días son iguales.
    Tus consejos son geniales y me has dejado pensando en lo complicado que tiene que ser hacer eso, es decir, viajar a un sitio, aclimatarte a él y volver a tu rutina de ejercicios, alimentación, costumbres, y poder “escribir”.
    Muchísimas gracias por tu entrada. También me ha ayudado la referencia a los viajes exprés, esos tan rápido donde visitas no se cuantos países en pocos días. El día que pueda viajar, quiero hacerlo tranquila. Muchos besos Diana 🙂

    1. Margarita gracias por tu comentario. Bueno espero puedas viajar más, ser sedentaria no es malo, pero sería genial que pudieras viajar más, deseo que para este año se te cumpla y con gusto en lo que pueda ayudarte ya sabes dónde encontrarme. Un abrazo guapa 🙂

  5. Me parece realmente increíble poder compaginar trabajar con la rutina diaria siendo un trabajo en el que viajas, ya que puedas compaginarlo con la familia es muy complicado, pero hacer turismo, tener el blog, conocer gente, trabajar, viajar y compaginarlo con la familia con niños me parece algo prácticamente imposible. Imagino que lo veis desde la perspectiva sin niños, pero para mi sería toda una odisea…

    1. Zoraida desde luego lo veo desde una perspectiva sin hijos, porque no tengo. Sin embargo, conozco parejas que lo hacen y sobreviven, incluso con dos o tres niños. No sé la verdad cómo lo harán es algo que tendré que investigar porque incluirlos en un estilo de vida de estos es muy complicado, que no imposible 🙂

      Un abrazo,

  6. Llevo dos años por mis circunstancias sin poder viajar y ya me siento ahogada! 🙂 este año espero poder hacerlo y vivirlo con mi famila de manera relajada pero aprovechando el tiempo

  7. A mí me cuesta acostumbrarme a los cambios, por lo que por lo menos hasta la semana no podría ponerme a trabajar con una rutina. Imagino que es porque no viajo mucho, sólo un día para una reunión y algo similar, pero no es lo mismo que habituarse en vivir en otro ciudad durante un tiempo.

    1. Mayte, es verdad no es lo mismo viajar por trabajo un día o dos a tratar de habituarse a la vida en un nuevo lugar, nueva ciudad, nuevo todo… Son cosas diferentes y es interesante como experiencia. Un abrazo guapa 🙂

  8. Muy buenos consejos. Algunos de ellos los cumplo. Aunque de todas formas las cosas aún cambian más si viajas con niños. Normalmente cuando nos vamos algún sitio yo miro uno o dos lugares que no me quiero perder, y los demás son adicionales. Además, en mi caso, viajo con niños y aún cuesta un poco más, pues siempre intentas que no se les haga pesado el viaje.
    Un saludo

  9. Hola.
    Viajar y trabajar las dos cosas, todo un reto, creo que sabría organizarme. Me agobio muchísimo con todo y siempre me falta tiempo. Anoto algunos consejos como escucharme y pararme a ver que necesito de verdad, y la meditación siempre me ha llamado la atención, sería bueno. Gracias por la entrada de hoy. Besos.

  10. En tiempos de dependencia laboral esos viajes maraton eran el pan de cada día pero te enseñan mucho a organizarte y a disfrutar en poco tiempo el lugar donde estás. Personalmente me cuesta solo 2 días adaptarme a una nueva ciudad porque es que soy muy preguntón y tengo la información desde el avión o bus de las personas, converso bastante. Actualmente puedo disfrutar y trabajar al mismo tiempo de una ciudad en 15 días, me parece que depende el ritmo de vida y de personalidad que uno tiene mas un poco de organización que lo veo secundario determinan el tiempo que puedas encontrar el equilibrio al traviajar, me aburre quedarme mas de 15 o 18 días , suficientes para conocer, adaptar mi rutina de trabajo en línea y claro darse algunos gustitos adicionales.

    1. J.William qué chévere experiencia. Definitivamente también es algo de personalidad como dices, muy bien es verdad que hay personas que necesitamos más tiempo, otras en un par de días e incluso horas ya se sienten parte del lugar, lo cual es fabuloso. Creo que todo es dependiendo de cómo sea uno 🙂

      Un abrazo 🙂

  11. Hola guapa… pues la verdad de que es un tema desconocido para mi, pues aunque vivo entre mi ciudad de origen y la que vivo, siempre se me hace dificil volverme a ubicar, es algo que me toma tiempo, me refiero a cuando estoy en una ciudad y llego a la otra, es interesante lo que compartes, pues pude identificar mis puntos debiles y asi poder aplicar mejoras en dichos momentos… gracias por compartir, un abrazo!!!!

  12. Yo la verdad que las veces que he viajado no ha sido por trabajo pero estoy completamente de acuerdo con lo que dices!

    Un besotte!

  13. Creo que por ahora no podría estar viajando y trabajando, mi tiempo es algo limitado e ir acoplando más rutinas a cualquier lugar en tan poco tiempo me volvería loca jajaja, y más aún saber que lo tendré que volver a hacer cada cierto tiempo, se que todo depende de la organización y la disciplina que te apliques, pero personalmente no lo veo factible en mi vida.

    1. Kat es complicado y sí se requiere de mucha, pero mucha disciplina. Creo que dependerá de la situación que uno esté viviendo, sino se necesita pues no se necesita y genial 🙂 Un abrazo guapa 🙂

  14. Muy buenos los consejos! Como siempre digo no suelo viajar, pero lo que me gusta de tus consejos es que no solo se pueden aplicar a viajes sino que también los puedes adaptar a tu día a día o si viajas ya a tu pueblo vecino.
    Es lo bueno que tienen, son muy adaptables.
    Me encantan!
    Un beso.
    MMEUC

  15. La verdad que cuando he viajado siempre ha sido por placer, nunca he llegado a viajar por trabajo, por lo cual no tenga esa “sobrecarga”. Creo que si tuviese que viajar por trabajo sabría adaptarme, soy una persona a la que no le cuesta viajar, ir en avión, hacer/deshacer maleta… me acostumbro muy rápido a los cambios. Feliz año!!

  16. Lo que está claro es que sea por placer o por trabajo, hay que saber organizarse porque sino no se va a disfrutar de ese tiempo que estemos fuera.